Las alfombras no solo embellecen nuestros espacios, también nos acompañan en cada momento del día, creando calidez y confort. Y como cualquier pieza especial de tu hogar, necesitan atención, sobre todo en verano, cuando el calor, la humedad y el mayor tránsito pueden afectarlas.

En Kaymanta, te damos las claves para cuidar tu alfombra este verano y mantenerla tan hermosa como el primer día.

1. Aspira con más frecuencia

En verano solemos tener las ventanas abiertas, lo que significa más polvo, polen y arena entrando en casa. Aspira tu alfombra al menos dos veces por semana para evitar que las partículas se acumulen en las fibras y acaben dañándolas.

2. Evita la exposición directa al sol

Si tu alfombra está colocada cerca de un ventanal, trata de moverla ligeramente o coloca visillos o cortinas para que no reciba sol directo todo el día. La luz intensa puede decolorar los colores con el tiempo.

3. Protégela de la humedad

En zonas con climas muy húmedos, conviene ventilar bien las habitaciones y, si es posible, usar un deshumidificador. La humedad prolongada puede favorecer la aparición de olores y moho en las fibras.

4. Trata las manchas de inmediato

Las comidas y las bebidas frescas del verano aumentan el riesgo de pequeños accidentes. Si algo cae sobre tu alfombra, actúa rápido: absorbe con un paño limpio y húmedo y evita frotar para no extender la mancha.

5. Considera una limpieza profesional al final de la temporada

Cuando termine el verano, es buena idea contratar una limpieza profesional para revitalizar la alfombra y prepararla para la siguiente temporada, eliminando polvo profundo y alargando su vida útil.

En resumen…

Con pequeños gestos, tu alfombra puede seguir siendo el alma de tu hogar durante años. En Kaymanta te ayudamos a elegir, cuidar y mantener esa pieza única que transforma tu espacio.

🌟 ¿Necesitas asesoramiento personalizado?

Estamos aquí para ti. Escríbenos y te contamos cómo mantener tu alfombra impecable todo el año.